Capítulo 721
Claudia estaba en el asiento del copiloto, mirando cómo el paisaje pasaba rápidamente por la ventana, y soltó un suspiro.
—Costadorada ha cambiado mucho, y el Grupo Fortaleza también.
Lorena no respondió, solo preguntó: —¿Y si Ana no quiere dejarlo?
—Pero ella siempre ha sido obediente desde pequeña. Vámonos, vamos a recogerla y salimos juntas.
Lorena la miró de reojo. Una persona capaz de difundir ese tipo de fotos no era alguien que se rendiría fácilmente.
Al final, había subestimado la naturaleza humana.
Recogieron a Ana a las seis de la tarde.
Cuando ella subió al auto, su mirada se posó en Lorena, quien conducía.
Pero aunque odiara con toda su alma a Lorena, no mostró ni un ápice de hostilidad. Solo hizo una pregunta.
—Señora Claudia, ¿vamos ahora al monasterio?
Claudia asintió con la cabeza. —Gracias a ustedes. Ana, yo también tengo algo que decirte.
Se sentó en el asiento trasero. Su rostro no mostraba ninguna emoción, incluso se notaba algo respetuosa. —Lo sé. Cuando lleguemos,

Haga clic para copiar el enlace
Descarga la aplicación Webfic para desbloquear contenido aún más emocionante
Encienda la cámara del teléfono para escanear directamente, o copie el enlace y ábralo en su navegador móvil
Encienda la cámara del teléfono para escanear directamente, o copie el enlace y ábralo en su navegador móvil