Capítulo 9

Los ojos de Lucas se contrajeron. Esta vez lo vio claramente: la marca de veras había desaparecido por completo. Sin el poder de la marca, no podía controlarme con amor. Después de que nos fuéramos, él golpeó la pared con rabia, dejando su puño cubierto de sangre. El mayordomo hombre lobo suspiró y le aconsejó que no insistiera más. —Jefe, aunque la marca de hombre lobo solo puede marcar a una persona en la vida, el mundo es impredecible. Si la señorita Serena ya ha decidido irse, ¿por qué usted insiste tanto? Lucas cerró los ojos por un momento y le preguntó en qué tipo de situación desaparecería la marca. El mayordomo vaciló un rato, midiendo sus palabras. —Cuando la pareja marcada pierda completamente la esperanza en usted. Lucas abrió los ojos de repente, que estaban llenos de venas sanguíneas. Balbuceó incoherentemente una frase. —¡Pero solo no soporto que la marca me controle, no es que no la ame! El mayordomo se quedó perplejo por un momento y luego dijo con vergüenza: —Líder, u